Diverticulitis y Diverticulosis, recomendaciones de diagnóstico y tratamiento

Diverticulosis y Diverticulitis del Colon

 

La diverticulosis es “la presencia de” y la diverticulitis es “la inflamación e infección de” uno o más divertículos (protuberancias en la pared del colon). La diverticulosis es común, no causa síntomas ni necesita tratamiento. La diverticulitis leve se trata con antibióticos. Se necesita cirugía si se desarrollan problemas. Una dieta alta en fibra, ejercicio y beber mucha agua pueden ayudar a prevenir.

 

DIAGNÓSTICO Y PRUEBAS
¿Cómo se diagnostica la diverticulosis?

Debido a que la mayoría de las personas con diverticulosis no tienen síntomas, generalmente se detecta a partir de otras pruebas que se realizan por un motivo no relacionado.

¿Cómo se diagnostica la diverticulitis?

Primero, el proveedor de atención médica debe de  preguntar sobre el historial médico, incluidos sus síntomas actuales, los tipos de alimentos que el paciente come normalmente, la frecuencia con la que defeca y otras preguntas sobre sus defecaciones, y revisará cualquier medicamento que esté tomando actualmente. El proveedor de atención médica deberá de revisar el abdomen para detectar dolor y sensibilidad.

Otras pruebas que se pueden realizar u ordenar para ayudar a diagnosticar la condición incluyen:

  • Análisis de sangre: se analiza la sangre para detectar signos de infección, como un recuento alto de glóbulos blancos .
  • Muestra de heces: La muestra de heces se analiza para detectar la presencia de bacterias o parásitos anormales como posibles causas de su infección, dolor abdominal, sangre en las heces, diarrea u otros síntomas.
  • Examen rectal digital: En este examen físico, el proveedor de atención médica inserta suavemente un dedo enguantado y lubricado en su recto para palpar cualquier problema en su ano o recto.
  • Tomografía computarizada: una tomografía computarizada puede mostrar divertículos infectados o inflamados y también revelar la gravedad de la diverticulitis.
  • Enema bario (también llamado radiografía del tracto gastrointestinal inferior): en esta prueba, se inyecta un líquido que contiene bario en el ano. El líquido recubre el interior del colon, lo que ayuda a que cualquier problema en el colon sea más visible en las radiografías.
  • Sigmoidoscopia: en este examen, se inserta un tubo delgado y flexible con una luz en el extremo en el recto y se mueve hacia el colon sigmoide. El tubo está conectado a una cámara de video. La cámara permite una inspección visual de su colon sigmoide (donde se forma la mayoría de los divertículos) y el recto.
  • Colonoscopia: en este examen, se puede examinar la longitud completa del colon. Se inserta un tubo delgado, flexible e iluminado con una cámara, llamado colonoscopio, a través del recto hasta el colon. Durante una colonoscopia, se examina el colon para detectar crecimientos anormales, llagas, úlceras, sangrado u otros problemas que podrían causar cambios en los hábitos intestinales o dolor abdominal. Se pueden tomar muestras de tejido yse pueden extirpar los pólipos .
  • Angiografía: si el paciente tiene sangrado rectal abundante y rápido, este procedimiento ayuda a encontrar de dónde proviene el sangrado. Durante esta prueba, las arterias que irrigan el colon se inyectan con un tinte inofensivo que permite ver el origen del sangrado.
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MANEJO Y TRATAMIENTO
¿Cómo se trata la diverticulosis?

Si el paciente tiene diverticulosis, es probable que no tenga síntomas y no necesite tratamiento. Sin embargo, dado que la diverticulosis podría provocar diverticulitis, se recomienda consumir una dieta rica en fibra como medida preventiva. Esto significa comer más frutas, verduras, granos, nueces, semillas, frijoles, legumbres y menos carne roja.

¿Cómo se trata la diverticulitis?

Si la diverticulitis es leve, el proveedor de atención médica deberá recetará un antibiótico oral, de amplio espectro. Es posible que se recomiende descansar, tomar medicamentos de venta libre para el dolor y seguir una dieta baja en fibra o una dieta líquida hasta que mejoren los síntomas. Una vez que sus síntomas mejoren, puede volver lentamente a los alimentos blandos y luego a una dieta más normal, que debe incluir muchos alimentos ricos en fibra. El paciente y el proveedor de atención médica deberán de discutir los detalles del plan de tratamiento.

Si la diverticulitis es grave, tiene sangrado rectal o está teniendo un episodio repetido de diverticulitis, es posible que se admita al paciente en el hospital para recibir antibióticos por vía intravenosa (IV), líquidos por vía IV o posiblemente se le considere para una cirugía.

¿Cuándo se considera la cirugía para la diverticulitis?

Se considera la cirugía para la diverticulitis si el peciente presenta:

  • Abscesos: Un absceso es una infección contenida o “amurallada” en el abdomen. Si el líquido de un absceso (una acumulación de bacterias y glóbulos blancos) no se drena con éxito con una aguja o un catéter, se necesita cirugía. En la cirugía, se limpia el absceso y se extirpa la parte afectada del colon.
  • Perforación/peritonitis: un desgarro (perforación) en el colon permite que el pus o las heces se filtren en la cavidad abdominal, lo que provoca peritonitis . Esta es una infección potencialmente mortal que requiere cirugía de emergencia para limpiar la cavidad y extirpar la parte dañada del colon.
  • Obstrucciones o estenosis: Las infecciones previas en el colon pueden causar la formación de cicatrices, lo que puede resultar en una obstrucción o estenosis (estrechamiento de secciones del colon) parcial o total. Un bloqueo completo requiere cirugía (el bloqueo parcial no).
  • Fístulas: una fístula es un pasaje o túnel anormal que se forma y se conecta con otro órgano. Un absceso que erosiona el tejido circundante crea estos conductos. Una fístula en el colon puede conectarse con la piel, la vejiga, la vagina, el útero u otra parte del colon. La mayoría de las fístulas no se cierran solas, por lo que se necesita cirugía.
  • Sangrado rectal continuo (también llamado sangrado diverticular): El sangrado diverticular ocurre cuando se revienta un pequeño vaso sanguíneo cerca de los divertículos. El sangrado leve generalmente se detiene por sí solo, pero alrededor del 20 % de los casos requieren tratamiento. Es posible que se necesite cirugía si fallan otros intentos para detener el sangrado, como el recorte, la infusión de medicamentos o la cauterización de la arteria sangrante. Si el sangrado es abundante y rápido, se necesita una cirugía de emergencia.
  • Diverticulitis severa que no ha respondido a otros métodos de tratamiento.
  • Múltiples ataques a pesar de seguir una dieta rica en fibra. El paciente y el cirujano pueden decidir que la cirugía para extirpar la parte enferma del colon es el mejor método para prevenir futuros ataques.
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PREVENCIÓN
¿Cómo se puede prevenir la diverticulosis?

Tener deposiciones regulares y evitar el estreñimiento y el esfuerzo es importante para prevenir la enfermedad diverticular y reducir sus complicaciones.

Para lograr esto se recomienda:

  • Comer más fibra: La fibra atrae más agua a las heces, haciéndolas más voluminosas, más blandas y más fáciles de mover, y más rápidamente, a través del colon.
  • Beber mucha agua: comer más fibra absorbe más agua, por lo que deberá aumentar la cantidad de agua que bebe para mantener las heces blandas y en movimiento. Muchos proveedores de atención médica sugieren beber la mitad del peso de su cuerpo en Litros. Por ejemplo, si pesa 80 kilos, debe beber 4 litros de agua por día.
  • Hacer ejercicio todos los días: el movimiento físico ayuda a que los alimentos pasen por el sistema intestinal. Si se puede, es recomendable hacer ejercicio durante 30 minutos la mayoría de los días.
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PRONÓSTICO
¿Qué esperar si se ha diagnosticado enfermedad diverticular?

Si se diagnostica diverticulosis, esto generalmente no es motivo de preocupación. Esta condición es muy común y aumenta con la edad. Está presente en aproximadamente el 50 % de las personas mayores de 60 años y en casi todas las personas mayores de 80 años. Es probable que ni siquiera tengan síntomas si se tiene diverticulosis. Si se tiene un caso leve de diverticulosis, es posible que desaparezca por sí solo sin tratamiento.

Hasta el 30% de las personas con diverticulosis desarrollan diverticulitis. Entre el 5% y el 15% desarrollará sangrado rectal.

La mayoría de las personas que tienen diverticulitis se recuperarán con un ciclo de siete a 10 días de antibióticos y descanso. Las complicaciones graves de la diverticulitis ocurren en aproximadamente el siguiente porcentaje de personas: perforación del colon (1% a 2% de los pacientes), obstrucción (poco frecuente), fístula (14%) o absceso (30%).

El mejor autotratamiento es comer una dieta alta en fibra (una llena de frutas y verduras, cereales y granos integrales, nueces, frijoles y legumbres. Además, beber más líquidos (la vigésima parte del peso corporal en kilos cada día) y hacer ejercicio ( ayuda a acelerar los desechos a través del colon).

Si presenta síntomas o cree tener diverticulitis, le recomendamos acercarse a su médico. En Operadora Médica Atlantis, contamos con la mas amplia red de servicios médicos integrales así como los mejores especialistas para todos los padecimientos.

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